Escritubre 2022 - Día 9 / Usurpación

Escritubre 2022

Día 9

Usurpación

Un susurro me despierta. Es como si el viento repitiera una y otra vez mi nombre llamándome entre sueños.

Un sueño intranquilo, es lo que recuerdo, uno en el que corría y debía esconderme.

En la oscuridad hay alguien... 

Escuchó un ruido y luego silencio. El picaporte se mueve y cruje.

De nuevo silencio.

Golpes en la puerta y una risa me pone la piel de gallina. De nuevo se mueve el picaporte... Va a entrar... Me va a encontrar.

Me arrinconó más y suplico que no me vea.

Un click y la puerta se abre de golpe.

Un cuerpo grande obstruye la luz y eso me tranquiliza. Le indico con el dedo que guarde silencio, él entiende y cierra la puerta.

Escuchó voces.

—Ves cariño, ya revisé y no hay ningún monstruo en el armario.

Escuchó pasos afuera y luego silencio.

Desde que tengo cuatro años, hay noches que debo esconderme, han pasado más de diez años desde aquella primera vez. Fue difícil al inicio está rutina, pero si queremos estar a salvo, debemos seguir las reglas. Mis padres y yo hemos aprendido a comunicarnos y ya saben reconocerme.

Es como una ruleta rusa cada noche cuando su hija va a buscarlos a su habitación para que vayan a revisar el closet y comprobarle que no hay ningún monstruo en el interior, deben acostarla y desearle buenas noches.

Esto deben hacerlo todos las noches. Nunca saben quién tocará su puerta cuando oscurezca, si aquella cosa que juega con nosotros o yo, su verdadera hija.